viernes, marzo 23, 2012
viernes, marzo 05, 2010
HISTORIA DEL APELLIDO GARABITO
LA HISTORIA DEL APELLIDO GARABITO
Garavito es un apellido de noble linaje, con primitiva casa solar en la montaña de Santander. También en Andalucía hubo caballeros apellidados Garavito y Garabito (variación ortográfica). En la Crónica del rey Don Juán II de Castilla, se hace mención de Gonzalo Garavito, quién figuró en los contratos que el citado monarca hizo con su padre Don Enrique. Según parece, poseía a Villanueva de Arcayos, que fue tomada por Don Alvaro de Luna. Quejóse Garavito al Rey, y éste mandó que le oyesen letrados.
Otras referencias que datan del Siglo XVII, nos remontan al año 1662, cuando Doña María Leonor de Garavito de León Messia, contrajo matrimonio con Don Andrés López de Ribera, hijo del Marqués de Valdelirios, en la Catedral de Lima (Perú).
Doña Luisa Garavito se unió en matrimonio con Fabrique de Acuña, Quinto Conde de Buendía, del que fue su tercera esposa. No tuvieron sucesión.
En el índice de expedientes personales del “Archivo General Militar de Segovia”, se citan descendientes del Linaje de Garabito, entre los que están: Francisco Garabito, del batallón de Infantería, en el año 1771; otro Francisco Garabito de Infantería, en 1778 y Alfonso Garabito León, de Caballería en 1830.
Este apellido es de origen ocupacional, debido a la acepción castellana de la palabra “garabito”, que significa “casilla que usan las vendedoras en las plazas de mercado”. Por consiguiente, su portador inicial fue alguien que se dedicaba a la venta de mercaderías. En cuanto se refiere a la etimología, el nombre Garavito es un derivado de la palabra “garabato” que significa “gancho retorcido”
BLASON DE ARMAS:
PARTIDO,
PRIMERO EN GULES, UNA CRUZ HUECA Y FLORETEADA DE ORO, Y EN SEGUNDO: EN PLATA, UN LEÓN RAMPANTE DE GULES.
GULES (ROJO): Símbolo de fuego y fortaleza, valor y fidelidad, alegría, honor, atrevimiento, intrepidez, se concede a quienes confiando en la fuerza de su brazo salen triunfantes de cualquier empresa.
ORO: A todo excede en valor, finura, pureza, riqueza, poder, fuerza, fé, constancia y pureza de sentimientos.
TIMBRE:
TRES PLUMAS DE AVESTRUZ
ORIGEN:
ESPAÑA., CASTELLANO DE LAS MONTAÑAS DE SANTANDER
ESCUDO DE ARMAS DEL APELLIDO GARABITO
TM
Bibliografía: The Historical Research Center .
5 de diciembre de 1993
con firma suscrita en HRC de autenticidad L.Carriñe
Número de registro 44280
Recopilación por Coqui Garabito
Recorrido cultural por templos de la ciudad
El próximo sábado 18 de octubre se llevará a cabo el Recorrido Cultural que cada mes organiza la Sociedad de Amigos del Museo de la Ciudad a.C., en esta ocasión se visitarán los templos de: Templo de Jesús María y el Ex-Convento, hoy Colegio Luis Silva, el Templo de Santa Teresa de Jesús y el Ex-Convento de las Carmelitas Descalzas, hoy llamado "El Convento", así como la antigua iglesia de La Compañía, hoy Biblioteca Iberoamericana, la Capilla de Loreto y el Olimpo House. Estas visitas serán guiadas por el arquitecto Ignacio Gómez Arriola y tendrán un horario de las 10:00 a las 14:00 horas; el punto de reunión para las personas que vayan a asistir es en el templo de "Jesús María" (que se ubica en Morelos 612, entre Mariano Bárcenas y Mezquitán) en punto de las 10:00 horas.
Templo de Jesús María:Don Juan de Santiago de León Garabito trajo de Compostela el Beaterio que dirigía el cura Fernando de Amézquita; este Beaterio lo trasladó en 1699 el obispo Galindo y Chávez al edificio que le construyó anexo a la ermita de San Sebastián, en Guadalajara, distinta de la de Analco, hasta que el Beaterio, con su escuela, se convirtió en el Convento de Jesús María de Gracia, y fue fundado en 1722 con el objeto de hacer vida religiosa de más austeridad que en las Gracias, como llamaban anteriormente a las monjas de Santa María de Gracia.Sobre las dos portadas dóricas de este templo, bajo unas ventanas rectangulares, se ven dos Triforios; en uno la Sagrada Familia, y en el otro, a los lados de una Virgen de la Luz con sus angelitos toscos, San Francisco y Santo Domingo; en el manchón que hay entre las puertas se encuentra una Soledad con mucho carácter, en medio-relieve.La torre de base cuadrangular es de tres cuerpos, con pilastras dóricas en el segundo y un remate octagonal en su cupulita, que sirve de peana a una escultura de María. Al otro extremo, en el ángulo de la iglesia, un San Cristóbal esculpido en piedra y a espaldas del templo, hacia el ábisde una hornacina, bajo doselete de piedra cubre una dorada custodia. En el interior pilastras de media caña; cornisamento dórico y bóvedas por arista con nervaduras. Los altares son neoclásicos y los coros, alto y bajo, tienen rejas machiembradas, en fierro cuadrado y fleje.Templo de Santa Teresa de Jesús:En 1690 el obispo Garabito puso el cimiento de este monasterio en el solar donde, arrimada a derruidos paredones, vivía una mujer a quien en Guadalajara se le conocía por "La Zacatito". De Puebla vinieron las fundadoras del monasterio en 1695.Sus portadas pareadas son sobrias, reminiscentes del herreriano y del madéjar; como motivo central ostenta emblemas armelitas entrelazados. Cuatro cláusulas dividen su interior y la torrecilla, de base cuadrangular, cae al oriente.Antigua Iglesia de la Compañía:Por 1590-1591 los jesuitas aceptaron fundar en Guadalajara un colegio bajo el nombre de Santo Tomás de Aquino, que fue centro de las misiones jesuitas desde el Nayarit hasta las Californias y Arizona.Expulsados los jesuitas por Carlos III, el señor Antonio Alcalde, gestionó establecer en este colegio la Universidad, donando setenta mil pesos para el sostenimiento de las cátedras; la Universidad se inauguró el 3 de noviembre de 1792. Extinguida la Universidad, el edificio sirvió de Instituto de Ciencias, e cuartel, asiento del Supremo Tribunal de Justicia y Escuela de Jurisprudencia. Reinstalada en 1925, el gobierno local vendió el edificio en 1937, demoliéndose al año siguiente.Solamente quedaron en pie la ex-iglesia, con su pórtico neoclásico de principios del XIX y su cúpula monumental. Mutilada la iglesia, interior y exteriormente, en 1913 se abrió una calle a sus espaldas. Anexa, y retirada de culto, sin sus altares, se encuentra la capilla de Loreto, construida en 1695 por el padre Juan María Salvatierra, de la Compañía de Jesús.Algunas de estos aspectos y otras cosas podrán ser admirados por las personas que se deseen inscribir en la Sociedad de Amigos del Museo de la Ciudad (Independencia 684) y se pueden comunicar a los teléfonos 658-37-06 y el 658-26-65.
_________________________________________________________________________
'
+ ''
+ ''
+ ''
+ '';
document.write(oeTags); // incorporar la película flash
} else { // la versión de flash es demasiado antigua o no se puede detectar el plug-in
var alternateContent = 'El contenido HTML alternativo debe colocarse aquí.'
+ 'Este contenido requiere Macromedia Flash Player.'
+ 'Obtener Flash';
document.write(alternateContent); // Insertar contenido que no sea de Flash
}
// -->
Febrero 2001
No. 4
GUADALAJARA EN CANTERA
EL TEMPLO DE SAN JOSÉ DE GRACIA
Cayó el templo de Santo Domingo. Un montón de ruinas quedó de aquella iglesia después de los dos encuentros que fuerzas liberales y conservadoras sos-tuvieron aquí, por el año de 1859.
Años después, cuando empezaba a aquietarse el encono de los bandos en pugna y la vida de la Iglesia volvía a cauces de alguna normalidad, se pensó en levantar de nuevo un templo en aquel sitio.
Para entonces florecía ya la Asociación Josefina fundada en 1876, que congregaba en la Arquidiócesis a 350 mil socios. Quienes pertenecían a tal Asociación además del culto y devoción a San José, debían dar un centavo cada mes.
Con esta aportación de los socios se pagaban los estudios de varios seminaristas y se sostenía con esplendor el culto Josefino... Todo eso y a tres años de fundada se encontró la Asociación con un elevado sobrante que se pensó aplicar, previa autorización del señor Don Pedro Loza, a la edificación de un templo a San José en el sitio donde se hacinaban los escom-bros de lo que fue el templo de Santo Domingo.
En Noviembre de 1879 se empezó a descombrar el sitio y, corridos diez años, en 1890, estaba celebrándose con pompa y solemnidad litúrgica la dedicación de esta iglesia que tiene entre sus méritos arquitectónicos, la armonía y la gracia con que se conjugan diferentes estilos, la gallardía de su torre, copia casi fiel de la del templo del Carmen de Celaya, debida a la inspiración de Tresguerras y la elegancia de su cúpula tomada de la cúpula del Sagrario.
Por dentro, el ciprés de orden compuesto en que domina el estilo árabe y los cinco altares en el cuerpo de la iglesia, de orden corintio, todo se hizo resplandecer en oros finos, plata y luz, que hizo decir a las piadosas damas de fines del siglo: “parece un cilacayote”, aludiendo a los dulces de dorados azúcares que se acostumbran por aquí.
En este último decenio (80s) han sido chapeados de cantera los exteriores del templo, se reedificó también la cantera la hermosa torre y el pórtico, en tanto que se renovó todo el dorado interior y se cambió de buena madera el artificioso entarimado de acuerdo a su dibujo original.
Por: Sr. Luis Santoscoy Godoy
Av. Alcalde y Reforma, Sector Hidalgo.
Guía de Edificios Antiguos de GuadalajaraRamón Mata Torres.
EL TEMPLO DE SAN JOSÉ DE ANALCO
Poco se sabe con exactitud sobre el origen de este templo.
Mota Padilla señala que el convento de San Francisco estuvo situado en el lugar que ocupara dicho templo. También señala Mota Padilla que en el año de 1688, se realizaban pláticas para la enseñanza de la doctrina cristiana en el templo de San José a cargo de los padres Jesuitas. El mismo autor hace coincidir la existencia del templo de San José en la época del Ilmo. Sr. Don Juan de Santiago de León Garabito.
El templo de San José de Analco siempre estuvo bajo la tutela de los frailes Franciscanos desde su fundación. Cuenta el P. Don Luis R. del Palacio que existió un decreto del Ilmo. Sr. Rivas fechado el 17 de Marzo de 1765 en el que por acuerdo del presidente de la Real Audiencia, se ordena el cambio a Analco de la pila bautismal, lo que motivó que entrasen en pleito los indios de los pueblos de San José y de San Sebastián, habiendo quedado en definitiva dicha pila en el templo de San José en donde podemos verla hoy en día.
Desde el punto de vista arquitectónico, el templo de San José siempre fue de mayores dimensiones que el de San Sebastián y su construcción también ha sufrido modi-ficaciones a través del tiempo.
Por: Arq. Guillermo de la Tprre
Analco No. 429, entre Constitución y Guadalupe Victoria, Sector Reforma.
Guía de Edificios Antiguos de GuadalajaraRamón Mata Torres
EL TEMPLO DE SAN SEBASTIÁN DE ANALCO
La iglesia de San Sebastián de Analco es una de las más antiguas iglesias de Guadalajara. Sus orígenes se remontan antes del año de 1599, fecha en que nos habla de su existencia Mota Padilla, bajo la forma de una ermita. En 1696, gracias a la instancia del Sr. Obispo de Guadalajara el Ilmo. Sr. Don Juan de Santiago y de León Garabito, se obtuvo el permiso real para su ampliación, comenzando las obras a principio de 1697.
El pueblo de Analco creció rápidamente, llegando a tener dos barrios: “Analco el viejo” que se desarrolló alrededor de San Sebastián y el otro llamado “Analco nuevo” que tenía como centro el templo de San José.
Al tiempo que el pueblo de Analco crecía, su ermita se ampliaba quedando convertida a manera de nave central flanqueada por sendas capillas, las cuales fueron edificadas a mediados del siglo XVIII. La primera en construirse fue la capilla dedicada a Nuestra Señora de Guadalupe, siendo la primera iglesia Guadalupana de esta ciudad. La primera piedra fue colocada al oriente de la ermita y bendecida por el M.R.P. Fray Felipe Hernández, Presidente del convento de San Francisco, en el año de 1721. La segunda capilla fue anexada al lado poniente recibiendo el nombre “Del Calvario”; la primera piedra fue colocada por el Sr. Cura de Analco el 7 de Abril de 1757.
Por: Arq. Guillermo de la Torre
Cuauhtémoc y 28 de Enero, Sector Reforma.
Guía de Edificios Antiguos de GuadalajaraRamón Mata Torres
FRASES HISTÓRICAS
“El historiador ha de tener tan buenos dotes y virtudes, que pase a caballo por delante de las generaciones y los siglos causando admiración”.
Quintiliano.
Regresar a Página Principal
© 2001 Universidad Autónoma de Guadalajara.
-1641 Juan de Santiago y de León Garabito nació, en la provincia de Andalucía, España, en el pueblo de Villa Palma; él ocuparía la cátedra episcopal en la diócesis de Guadalajara, capital de Nueva Galicia.
window.google_render_ad();
· BisBishop Juan de Santiago y León Garabito † El obispo Juan de Santiago y León Garabito †
Deceased Fallecido
Bishop of Guadalajara , Jalisco Obispo de Guadalajara, Jalisco
Events Eventos
Date Fecha
Age Edad
Event Evento
Title Título
13 Jul 1641 13 julio 1641
Born Nacido
Palma Palma
1676 1676
34.5 34,5
Appointed Nombrado
Bishop of Puerto Rico (Porto Rico) Obispo de Puerto Rico (Puerto Rico)
13 Sep 1677 13 Sep 1677
36.2 36,2
Appointed Nombrado
Bishop of Guadalajara , Jalisco, México Obispo de Guadalajara, Jalisco, México
22 May 1678 22 mayo 1678
36.9 36,9
Ordained Bishop Ordenado Obispo
Bishop of Guadalajara , Jalisco, México Obispo de Guadalajara, Jalisco, México
11 Jul 1694 11 julio 1694
53.0 53,0
Died Murió
Bishop of Guadalajara , Jalisco, México Obispo de Guadalajara, Jalisco, México
a bishop for 16.1 years un obispo de 16,1 años
Home Search Countries Religious Orders Popes Holy See Roman Curia Statistics Inicio Buscar Países Religiosos Papas Santa Sede Curia romana Estadísticas Bishops : All Living Deceased Youngest Oldest Cardinal Electors Obispos: Todos Vivir Fallecido Joven más antiguo Cardenal Electores Dioceses : All Current Titular Vacant Structured View Diócesis: Todos Actualidad Titular Ofertas de Trabajo Ver Estructurado Events : Recent by Date by Year Necrology Acto: Recientes Fecha Año Necrologio
About Catholic-Hierarchy
Acerca de la jerarquía católica -
Terminology/Site Help Terminología / Ayuda del sitio
Copyright David M. Cheney, 1996-2008 Copyright David M. Cheney, 1996-2008 code: v2.5.0, 1 Jan 08; data: 17 Jan 08 Código: v2.5.0, 1 enero 08; datos: 17 de 08 de enero
var gaJsHost = (("https:" == document.location.protocol) ? "https://ssl." : "http://www.");
document.write(unescape("%3Cscript src='" + gaJsHost + "google-analytics.com/ga.js' type='text/javascript'%3E%3C/script%3E"));
var pageTracker = _gat._getTracker("UA-195602-1");
pageTracker._initData();
pageTracker._trackPageview();
http://prepajalisco.sems.udg.mx/ en esta página también mencionan al Sr. Obispo Leon Garabito
Diego Cristóbal Mesía y León Garabito (*Sevilla, España) [1] 1º Conde de Sierra Bella; doctor en Cánones y Leyes; Oidor de la Audiencia de Quito; Fiscal y Oidor de la Audiencia de Lima; Presidente de la Audiencia de Charcas. m. Jerónima Roselde y Valenzuela [1]
Cristóbal Mesía y Valenzuela *Quito, Ecuador [1] 2º conde de Sierra Bella. m. Santiago, Chile María de Torres y Olivares [1]
A1. Diego Pedro Mesía y Torres *Carabaya, Perú [1] 3º conde de Sierra Bella; paje de Carlos II; Teniente General de Caballería. m. María de Munibe y León Garabito
B1. Micaela Mesía y León Garabito [1,a]. m. Luis de Ureta y de la Carrera.
B2. Leonor Mesía y León Garabito.
B3. Isabel Mesía y León Garabito.
B4. Nicolasa Mesía y León Garabito.
B5. Andrea Mesía y León Garabito.
B6. Cristóbal Mesía y León Garabito [1] 4º Conde de Sierra Bella; Señor del Mayorazgo Torres, aportado por su abuelo materno. m. María Josefa Aliaga y Colmenares [1] .
C1. María Josefa Mesía y Aliaga [1] 5º Condesa de Sierra Bella; Señora del Mayorazgo Torres. m. José María de la Fuente y Carrillo de Albornoz. Marqués de San Miguel de Híjar.
D1. María Josefa de la Fuente y Mesía [1] 6º Condesa de Sierra Bella; Marquesa de San Miguel de Híjar; Señora del Mayorazgo Torres. m. José Matías Vázquez de Acuña y Rivera [1] 6º Conde de la Vega del Ren; C.O.S.
Juan de Santiago de León Garavito(1641-1694)
En la Villa de Palma, Andalucía, nació nuestro biografiado, el 13 de julio de 1641, teniendo por padres al Capitán D. Antonio de Santiago y a su esposa doña María de León Garavito, parientes de San Pedro de Alcántara y de los condes de Norofía y de Gijón.
Cuando hubo aprendido al lado de sus padres y con buenos preceptores las primeras letras y el latín, a la edad de 17 años fue enviado a Córdoba, al Colegio de Nuestra Señora de la Asunción, fundado por el gran maestro San Juan de Avila y regido por los jesuitas. Allí estudió Filosofía y Teología con tal aprovechamiento que apenas concluyó el estudio de la divina ciencia fue elegido Presidente del mismo seminario; cargo que no desempeñó, por tener que regresar a su villa natal, ínterin obtenía la dispensación de un año de edad que le saltaba para poder recibir canónicamente el sacerdocio.
Llegada la dispensa, los condes de la villa de Palma nombraron al joven pretendiente, administrador del hospital de la misma población; y teniendo ya con que vivir, fue ordenado sacerdote.
Dos o tres años llevaba de desempeñar la administración, cuando los doctores del Colegio mayor de Cuenca le instaron para que se opusiese a fin de obtener una beca universitaria en la ilustre academia salmaticense, donde en efecto vistió el manto y la beca a que se opuso, siendo luego decorado además con la borla de Doctor en Sagrada Teología. Allí, después de haber substituido a diversos catedráticos logró, previa la correspondiente oposición, obtener en propiedad una cátedra de Filosofía; cargo que desempeñó con el mayor lucimiento, hasta que habiendo vacado la Canongía magistral de Badajoz se opuso también a ella e igualmente la obtuvo.
Pormenor refiere un biógrafo las labores evangélicas a que el Magistral se dedicara entonces con fruto de las almas cristianas, y entre otros sucesos, la reformación que logró hacer de un convento de religiosas agustinas, que de calzadas, por instigaciones de su director el Sr. Canónigo Santiago, pasaron a ser descalzas; la feliz manera con que dio empleo a la virtud de un gran siervo de Dios, llamado D. Fernando de Montealegre, cuya vida escribió con acierto nuestro héroe, y finalmente, la facundia que desplegaba el Magistral en el desempeño de la principal obligación de su cargo, que es la predicación; pero a nosotros no nos es posible detenernos en esos minuciosos detalles, dado el poco aliento del presente artículo nuestro.
Sólo debemos hacer notar, que tanta fue la consideración que se granjeó en su Cabildo, que habiéndose convocado a las Iglesias de España a una junta para el arreglo de un gravísimo negocio, fue electo representante de la Iglesia de Badajoz el Sr. de Santiago; y con tal justificación desempeñó en Madrid ese cometido que, aunque llegó a oponerse a la voluntad de la Reina Gobernadora, Doña María Ana de Austria, ésta lo hizo nombrar Calificador de la Suprema Inquisición y Predicador de su Majestad.
Aunque abandonó la Corte nuestro D. Juan para regresar a su Iglesia, allá dejaba memoria de los grandes méritos que lo hacían acreedor a las más altas dignidades eclesiásticas; y por eso no es extraño que a poco de haber vuelto a Badajoz, se proveyese en su persona el Obispado de Puerto Rico, que aceptó no sin escrúpulos, provenidos de su humildad.
Pasó entonces de nuevo a la capital del Reino, para llenar deberes imprescindibles, que solicitaban su presencia, antes de embarcarse para el Nuevo Mundo; y hallándose en Madrid todavía, fue agraciado con la traslación al Obispado de Guadalajara de Indias, por cédula fechada en Zaragoza a 31 de mayo de 1677; dignidad la del episcopado que le había sido predicho que obtendría, según se refiere en su historia. Partió de Cádiz para estas tierras en la flota que vino en aquel año; tomó posesión de su Sede el 7 de enero de 1678 y presentó sus borlas el 22 de mayo inmediato; aunque se ignora la fecha precisa de su consagración.
Su primer cuidado fue visitar su Grey, llegando en ese viaje hasta Nuevo León, precisamente en aquellos tiempos en que los indios de Nuevo México se sublevaron, matando a veintiún franciscanos y quemaron el fuerte de Santa Fe; y llegó también a las serranías del Nayarit; sin que los bárbaros en una o en otra parte le hostilizasen, sino antes bien, como dice su biógrafo, "fue caso de admiración. ver a aquellos indómitos gentiles que como fieras vivían alzados en las silvestres grutas de los montes, bajar ya como manadas de mansos corderos a festejar el camino a su sagrado pastor; y convirtiendo en triunfales los belicosos arcos de su milicia, con grande regocijo y algazara disparaban al aire tanta multitud de flechas, que parecía intentaban defender a su amoroso Padre de los rayos del sol, con el toldo formado de sus volantes plumas".
A esa época refiere también el biógrafo la fundación, en Compostela, del beaterio de Jesús Nazareno, llevada a cabo por el cura de aquella villa Lic. D. Antonio Amézquita, pero debido a los consejos del Sr. Garavito. Esa comunidad, digámoslo de una vez, fue trasladada a Guadalajara, por el mismo Prelado, cuando murió el fundador; le dio casa y constituciones, y en ella tuvo origen el monasterio de religiosas dominicas de Jesús María.
De regreso en Guadalajara, el apostólico Prelado se dedicó a aderezar la Catedral que se hallaba muy desaseada. Vistió sus paredes de hermosos lienzos, hizo los colaterales, proveyó su sacristía de ornamentos y vasos sagrados, hizo ceñir la parte que daba al frente de la plaza principal, con un cementerio; decoró el templo por el poniente, con una espaciosa y levantada lonja; coronó de una baranda la circunferencia superior del mismo, y por fin, hizo levantar la torre que faltaba para corresponder con la única que ya existía y que era la antigua del lado Sur de la fachada.
Se le debió luego la reforma material de gran parte del convento de Santa María de Gracia, reedificado allí porterías, dormitorios, claustros, salas de labor, enfermería y otras oficinas.
En seguida, dio principio a fundar la congregación felipense, que tuvo sus orígenes en la Iglesia de la Soledad. Acometió luego la empresa de instituir en el colegio de la Compañía de Jesús, tres cátedras, una de Filosofía y dos de Teología, pensionándolas con $900 cada año; mientras se dotaban de una manera estable, como a poco lo hizo el ejemplar Prebendado D. Simón Ruiz Canejero.
Fuera de esas obras, su caridad ardientísima le hacía dar todo lo que podía a los pobres y aun más allá de lo que podía: a diario comían más de cien necesitados en las puertas de su Palacio; daba también a diario de comer y almorzar a los presos de la cárcel; socorría los hospitales, los enfermos y los vergonzantes de una manera continua. Verdaderos prodigios acaecieron a ese respecto, ya pareciendo multiplicarse la limosna que repartía; o proveyéndole Dios de dinero inesperadamente, cuando no tenía alguno para socorrer a los afligidos. Predicaba sin descanso; era humildísimo, pudoroso hasta el punto de afirmarse que jamás perdió la virginidad; sumamente escrupuloso; defensor intrasingente de las inmunidades eclesiásticas, por las cuales tuvo que sufrir mucho; y estaba adornado con tantas y tan grandes virtudes que le han merecido el dictado de "espejo de ejemplares obispos".
Ya cerca del fin de su vida, buscó un retiro en la villa de Zapopan, que aunque sólo era un pueblecillo de unos pocos jacales, pero que allí tenía un tesoro en la imagen de la Virgen del mismo nombre a quien nuestro Obispo había hecho "Patrona y Protectora de sus actos". Fabricóse allí, a efecto de estar cerca de la Celestial Señora, una casa episcopal; lleno de amor por la Santa Imagen, la publicó luego milagrosa; y después emprendió en hacerle un santuario digno de ella, edificio que dejó muy en sus principios.
Habiéndole sobrevenido una gran dolencia a nuestro Obispo se trasladó a esta ciudad; y aunque al principio rehusaba hacer cama, por seguir entregado a todos los actos de su ministerio, al fin tuvo que declararse vencido; y los médicos le anunciaron entonces que apenas le quedarían siete u ocho días de vida; a lo que el enfermo repuso: "¿Siete días nomás? No me pesa; pues deseo con el Apóstol desatarme de este mortal nudo, para estar con Cristo. Sólo siento morir, por mis pobres".
Según el P. Caballero, que escribió la vida del Ilmo. Sr. Garavito, dio su alma al Señor este insigne varón el 10 de julio de 1694, entre seis y siete; pero en la partida de defunción está escrito que fue el día 11, a las seis y media de la tarde.
En los 17 años, 7 meses y 4 días que duró su gobierno, le tocaron de cuarta episcopal $214,700, que invirtió en hacer beneficios a los pobres y Diócesis.
Esos compendiosos beneficios los que hacían exclamar a uno de sus doctos panegiristas de nuestro Obispo y dirigiéndose a él, estas palabras que hoy pueden repetirse:
"En el sepulcro yaces, pero en nuestro corazón vives; en la bóveda te ocultas, pero en nuestra lengua te ensalzas, en la sepultura te apagas, pero en la memoria te eternizas; en el polvo te disuelves, pero en las llamas de nuestro amor renaces; en la tierra te consumes, pero en el ciclo te mejoras; en el tiempo te acabas, pero en la eternidad gozas".